A pesar de la lluvia, que hizo aparición el sábado a la tarde y el domingo por la mañana, la fiesta del hierro atrajo a mucha gente tanto de Gallarta como de otros lugares.
El espacio festivo, cercano a la Mina Concha II ofrecía una variedad de productos típicos de la zona, como chacinería, pasteles, quesos, fruta y verdura, así como artesanía variada (cestería, juguetería en madera, cuchillería etc ).
La oferta en bolsa de minerales de otros años, sin embargo estaba menguada y un poco dispersa, destacando si cabe el puesto del Museo de La Minería , donde se podían encontrar tanto colecciones de minerales como sus publicaciones, recomendables para informarse sobre el pasado minero de la zona.
Creo que no me equivoco al decir que las demostraciones tanto de utillaje como de herrería y cantería suelen ser el atractivo principal de la fiesta, sólo eclipsado con el asado vacuno.




Esperemos que el año que viene, podamos disfrutar tanto de mejor tiempo como de una zona un poco mejor acondicionada para la lluvia, esta feria se está estableciendo como un referente de las celebraciones en las encartaciones y las instituciones debería volcarse más en este tipo de eventos, que proporcionan tanto cultura como entretenimiento.
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